TRIPLE CRIMEN NARCO: el RECORRIDO del ÚLTIMO ADIÓS
En un contexto de horror y conmoción, el país se prepara para despedir a Brenda y Morena, dos jóvenes víctimas de un brutal crimen narco. El cortejo fúnebre, que se espera inicie alrededor de las 11 de la mañana en el cementerio de las Praderas, ha generado una gran expectación en la comunidad, que se une en duelo y rechazo a la violencia desmedida que ha cobrado la vida de estas chicas.
Las familias, acompañadas por amigos y vecinos, se disponen a realizar un recorrido por el barrio donde crecieron, un acto simbólico que busca visibilizar el dolor y la indignación ante un crimen que ha sacudido a la sociedad. La ausencia de un responso en la capilla, y la decisión de sepultarlas juntas en la misma tumba, reflejan la profunda tristeza y la urgencia de un cambio en la lucha contra el narcotráfico.
Mientras tanto, la investigación avanza en secreto, con cuatro detenidos que se han negado a declarar. Las autoridades han trasladado a los sospechosos a la unidad 61 de Melchor Romero, donde se espera que la justicia actúe con celeridad. Este caso ha puesto de manifiesto la violencia de las bandas narcos, que operan sin límites y muestran su poder a través de actos de crueldad inimaginables.
La comunidad, que se ha volcado en apoyo a las familias, exige respuestas y acciones efectivas para frenar la ola de violencia que azota a la región. El clamor por justicia se siente en cada rincón, mientras los vecinos se preparan para rendir homenaje a Brenda y Morena, en un acto que trasciende el dolor y llama a la reflexión sobre el futuro de la juventud en un entorno marcado por el narcotráfico.
La cobertura de este trágico suceso continúa, y el país observa con atención el desenlace de una historia que pone en evidencia la necesidad urgente de políticas que protejan a los más vulnerables y combatan la impunidad de las organizaciones criminales.