Miles de personas se movilizan en Florencio Varela y Mar del Plata en respuesta a un brutal triple femicidio que ha conmocionado al país. Esta tarde, las calles se llenan de carteles con la consigna “Ni Una Menos”, mientras las comunidades exigen justicia por las víctimas, cuyos cuerpos fueron encontrados en una vivienda de Río Iguazú. La indignación es palpable; las manifestantes, entre lágrimas y gritos, claman por un cambio urgente en la política de género y la protección de las mujeres.
En Florencio Varela, los vecinos se congregan cerca de la escena del crimen, donde la brutalidad del hecho ha dejado a la comunidad en estado de shock. “El presidente y el gobernador nos han fallado”, grita una de las manifestantes, recordando la falta de apoyo a las políticas de género y la creciente violencia contra las mujeres. La desesperación se siente en cada palabra, en cada cartel que denuncia la misoginia arraigada en la sociedad.
Mientras tanto, en Mar del Plata, la movilización también toma fuerza. Las mujeres, unidas por el dolor y la rabia, se niegan a ser silenciadas. “Cualquiera de nosotras puede ser la próxima”, advierten, reflejando la angustia que vive cada día en un contexto de creciente violencia. Los testimonios de quienes participan revelan la urgencia de actuar: “Estamos aquí para decir nunca más”, afirman, recordando que el silencio no es una opción.
Las protestas se desarrollan en un clima de tensión, con la policía presente para mantener el orden. Sin embargo, la determinación de las manifestantes es inquebrantable; exigen respuestas y acciones concretas. La ola de femicidios en Argentina es alarmante, con un femicidio cada 26 horas. La movilización de hoy es un grito de desesperación y un llamado a la acción: ¡Basta de violencia, basta de impunidad! Las calles resuenan con una sola voz: “Ni Una Menos”.