El presidente Javier Milei llega hoy a Estados Unidos en un momento crítico para la economía argentina. La alfombra roja se extiende mientras el secretario del Tesoro, Scott Besen, promete un apoyo económico “grande y contundente” para el país sudamericano. Esta noticia se produce en un contexto de creciente incertidumbre, donde el riesgo país ha alcanzado niveles alarmantes y los bonos y acciones han caído drásticamente.
El gobierno argentino ha tomado medidas audaces, eliminando las retenciones para todos los granos hasta el 31 de octubre. Sin embargo, esta decisión no está exenta de consecuencias, ya que se estima que el costo fiscal de esta medida ascenderá a 11.100 millones de dólares, lo que representa un 0,15% del PIB. La pregunta que todos se hacen es: ¿cómo afectará esto a las finanzas del país en un periodo electoral tan delicado?
El mercado ha reaccionado con optimismo tras estas noticias, con un aumento en los bonos y acciones que oscilan entre el 10% y el 15%. El tipo de cambio minorista cerró en 14.430 pesos, un desplome del 85%. Sin embargo, los expertos advierten que esta aparente estabilidad podría ser efímera. La volatilidad sigue latente, especialmente con las elecciones a la vista el 26 de octubre.
El mensaje es claro: la acumulación de dólares es crucial, pero la presión para mantener un tipo de cambio apreciado podría llevar a una nueva crisis. En este clima de incertidumbre, todos los ojos están puestos en cómo se desarrollarán los acontecimientos en los próximos días. La economía argentina se encuentra en una encrucijada, y el tiempo apremia.