Un escalofriante crimen ha conmocionado a la ciudad de Zárate: un jubilado de 79 años, Saúl, fue brutalmente asesinado por un grupo de expolicías y delincuentes comunes. La indignación de la comunidad es palpable, y una multitudinaria marcha se está organizando en el centro de la ciudad en respuesta a este atroz acto de violencia.
Los hechos se desarrollaron cuando Saúl fue secuestrado en su hogar por un expolicía, su pareja, una oficial en actividad, y dos cómplices. Tras un intento fallido de robo, el grupo ejecutó a Saúl de un tiro en la nuca y abandonó su cuerpo a escasos metros de la ruta 9. La autopsia revela la brutalidad del crimen, y la comunidad no puede contener su rabia.
Los cuatro sospechosos ya están detenidos y el fiscal Juan Manuel Esperante ha tomado las riendas del caso, asegurando que se hará justicia. Sin embargo, la confianza en las fuerzas de seguridad se ha visto gravemente afectada, ya que la comunidad se siente traicionada por aquellos que deberían protegerla.
La marcha, convocada para las 18:00 horas, ha comenzado a atraer a un gran número de vecinos que exigen respuestas y justicia. Policías resguardan la comisaría primera, temiendo que la indignación popular pueda desbordarse. Las familias, visiblemente afectadas, se preguntan por qué hay tantos efectivos en la calle y reclaman que la policía debe proteger a la comunidad, no a los criminales.
La historia de Saúl ha encendido una llama de protesta en Zárate, un llamado a la justicia que no puede ser ignorado. La comunidad exige que se escuche su voz y que se tomen medidas para garantizar su seguridad. Este crimen no quedará impune.