El clima político en Argentina se ha desbordado tras las explosivas declaraciones de Rial, quien no se contuvo al criticar al presidente Milei y su reciente decisión de eliminar las retenciones al campo. “Esto se va a la mierd@”, exclamó, reflejando el caos y la desesperación que sienten muchos argentinos frente a la situación económica actual. Rial denunció que esta maniobra beneficia solo a un pequeño grupo de especuladores, amigos del gobierno, mientras el 95% de la población sufre las consecuencias.
La medida, anunciada por el vocero presidencial, busca incentivar la liquidación de granos antes de las elecciones, pero ha generado un clima de incertidumbre en el sector agrícola. “¿Qué vas a hacer? ¿Vas a liquidar ahora o esperar el resultado de las elecciones?”, cuestionó Rial a los grandes terratenientes, advirtiendo que muchos se encuentran en una encrucijada. La decisión de eliminar las retenciones, que debía ser un alivio, se presenta como un guiño a quienes han estado especulando con el “carry trade”, dejando a la mayoría de los ciudadanos en una situación precaria.
La tensión se siente en el aire, con los productores agrícolas divididos entre actuar rápidamente o esperar. La urgencia de la situación es palpable, y las palabras de Rial resuenan en el debate público: “Estamos al borde de la quiebra, estamos en un caos”. La crisis económica se profundiza mientras el gobierno intenta recaudar fondos, y la pregunta que queda en el aire es si esta estrategia será suficiente para evitar un colapso inminente. La situación es crítica y todos los ojos están puestos en el desenlace de esta crisis que amenaza con desbordarse.