CÓRDOBA: CIERRAN las CALLES con PORTONES por la INSEGURIDAD
Un clima de tensión y descontento se apodera de Villa Yende, Córdoba, donde los vecinos se alzan en contra de la polémica decisión del intendente de cerrar calles con portones como medida contra la creciente inseguridad. En una reunión urgente, residentes de los barrios Lomas Sur y Pan de Azúcar expresaron su indignación, argumentando que esta solución no solo es ineficaz, sino que también estigmatiza a sus comunidades.
La propuesta, que contempla la instalación de hasta 15 portones, ha sido calificada por los vecinos como “una locura” y “totalmente arbitraria”. En lugar de abordar las raíces del problema, como el aumento de patrullajes y mejoras en iluminación, los funcionarios parecen optar por una medida que limita la libre circulación, algo que ya ha sido considerado ilegal en otras jurisdicciones.
Los residentes, que han recolectado miles de firmas en oposición a esta medida, argumentan que los portones no detendrán a los delincuentes y, en cambio, complicarán el acceso a servicios de emergencia. “¿Qué pasará si hay una inundación o una urgencia médica?”, cuestionan, evidenciando la falta de un plan viable por parte de las autoridades.
A pesar de la fuerte oposición, el municipio avanza con la instalación de los portones, ignorando las preocupaciones de la comunidad. Los vecinos han decidido actuar, buscando asesoramiento legal y creando un mapa del delito para identificar las áreas más afectadas. “No estamos en contra de la seguridad, pero esta no es la solución”, afirman, mientras se preparan para continuar su lucha por una respuesta más efectiva y justa ante la inseguridad que los acecha. La situación en Villa Yende es un claro ejemplo de cómo la falta de diálogo y participación puede llevar a decisiones que agravan los problemas en lugar de solucionarlos.