Teherán, Irán – Las calles de Teherán han recuperado la normalidad tras tres días de tregua entre Israel e Irán, marcando un respiro en la tensión que ha dominado la capital iraní durante más de una semana. En un giro inesperado, el líder supremo, Ali Jameneí, ha roto su silencio en un video donde aclamó al pueblo iraní, describiendo la situación como una victoria frente a Israel y Estados Unidos.
A primera hora de la mañana, los ciudadanos comenzaron a salir de sus casas, abandonando el confinamiento que había mantenido a la mitad de la población en un estado de miedo constante. Las imágenes de la Plaza de la Revolución se llenan de militantes y civiles que, con velas en mano, rinden homenaje a las víctimas civiles de los recientes enfrentamientos. Entre ellos, Serina, una joven de 14 años, comparte su angustia y el miedo que sintieron durante los días de bombardeos, mientras su hermana pequeña anhelaba salir de casa sin comprender la gravedad de la situación.
Durante casi dos semanas, Teherán vivió un panorama inédito, con la mayoría de sus habitantes huyendo de la ciudad. Sin embargo, hoy se percibe un cambio palpable. Los mercados, que estaban desiertos, comienzan a llenarse lentamente de vida, aunque aún con cautela. “Es el primer día que salgo desde el 13 de junio”, comenta Fiascram, un comerciante que refleja el sentimiento de muchos que, tras días de incertidumbre, ahora sienten una mezcla de alivio y temor.
Mientras el alto el fuego se mantiene, el pueblo iraní enfrenta un nuevo capítulo, marcado por el recuerdo de los que han caído y la esperanza de reconstruir lo que se ha perdido. La calma ha vuelto, pero la sombra del conflicto persiste, y el futuro sigue siendo incierto.