El escándalo estalla en el corazón de la campaña electoral argentina. Javier Milei, candidato presidencial, ha sido acusado de encubrir un acto de campaña bajo la presentación de su nuevo libro, “La construcción del milagro”, programado para el 6 de octubre en el Movistar Arena. La revelación impactante: el financiamiento proviene de Eduardo Kovalivker, un empresario vinculado a un escándalo de corrupción en España.
Pablo Duga ha destapado que la modesta editorial Hojas del Sur, encargada de publicar el libro de Milei, no tiene los recursos para cubrir los exorbitantes 100,000 dólares que cuesta alquilar el Movistar Arena. Este acto, que se presenta como un evento literario, es, en realidad, una maniobra electoral disfrazada. A tan solo 20 días de las elecciones, la conexión entre Kovalivker y Milei plantea serias dudas sobre la transparencia de la financiación de la campaña.
El vínculo entre Kovalivker, conocido por sus escándalos previos, y la editorial ha sido subrayado, revelando que ha financiado múltiples publicaciones a través de Hojas del Sur. La situación se complica aún más al recordar que Kovalivker es el principal accionista de una droguería que ha estado en el centro de controversias por sus lazos con el gobierno argentino. La pregunta que resuena es clara: ¿se está utilizando dinero sucio para financiar la campaña de Milei?
Las implicaciones legales son enormes. La justicia electoral debe investigar de inmediato este posible conflicto de intereses. La financiación encubierta de actos de campaña es ilegal, y la conexión entre Kovalivker y Milei podría ser el hilo que desate una crisis política aún mayor en Argentina. Mientras tanto, el reloj avanza y la política argentina se encuentra en un estado de alerta máxima.