Xi Jinping ha hecho un llamado urgente a la desescalada en medio de la creciente tensión entre Irán e Israel, mientras China inicia la evacuación de sus ciudadanos de la región. En una declaración durante la cumbre de China y Asia Central, el presidente chino expresó su profunda preocupación por el conflicto en aumento, instando a todas las partes a trabajar para reducir las tensiones lo antes posible. “El conflicto militar no es la solución a los problemas”, afirmó Xi, enfatizando que el aumento de las tensiones regionales no coincide con los intereses comunes de la comunidad internacional.

La situación se ha intensificado tras las operaciones militares de Israel contra Irán, lo que ha llevado a un aumento repentino de la violencia en el Medio Oriente. En respuesta a las crecientes preocupaciones sobre un conflicto regional más amplio, el Ministerio de Relaciones Exteriores de China confirmó el inicio de la evacuación de sus nacionales de Irán e Israel. Algunos ciudadanos ya han sido trasladados a países vecinos, aunque no se especificaron cuáles.

La embajada china en Israel ha instado a sus ciudadanos a salir a través de las fronteras terrestres, recomendando el paso por Jordania, ya que el espacio aéreo israelí permanece cerrado y el estado de emergencia se ha extendido hasta el 30 de junio. Estos acontecimientos se producen en un contexto de creciente presión internacional para la desescalada, con 21 países árabes y musulmanes condenando los ataques israelíes y pidiendo moderación.

Las declaraciones de Xi se producen tras la oferta del presidente ruso Vladimir Putin de mediar entre Irán e Israel y coinciden con la reunión del G7 en Canadá, donde se instó a un alto el fuego en Gaza. En este clima de tensión, China se posiciona como un actor diplomático clave, buscando restaurar la paz y la estabilidad en una región marcada por el conflicto. La condena de las acciones israelíes por parte de China, catalogadas como una violación inaceptable del derecho internacional, subraya la urgencia de la situación y el papel emergente de Pekín en el escenario internacional.