Catherine deslumbra en Wimbledon con lunares mientras la realeza del tenis se prepara para su icónica vuelta
La anticipación crece a medida que el prestigioso torneo de Wimbledon se prepara para abrir sus puertas este verano, y no solo los ojos están puestos en la cancha central, sino también en el exclusivo palco real. La Princesa de Gales, Catherine, ha dejado a todos boquiabiertos con un impresionante vestido azul de Alisandra Rich, adornado con coquetos lunares blancos que reafirma su estatus como ícono de estilo moderno y figura querida en la vida pública británica.
El vestido, con una cintura ceñida gracias a un cinturón discreto, resalta su esbelta figura y su elegante escote plisado añade un toque de sofisticación que se complementa perfectamente con las mangas globos de tres cuartos, aportando un aire romántico. Catherine optó por joyas sutiles, eligiendo unos pendientes de gota atemporales que dejan que el conjunto hable por sí mismo, mientras su look de belleza minimalista resalta su belleza natural con un suave ahumado en los ojos y un delicado labial rosa pálido.
Más allá de la moda, la presencia de Catherine en Wimbledon tiene un significado más profundo. Desde 2016, ha sido la madrina real del All England Lawn Tennis and Croquet Club, y su amor por el deporte la ha llevado a convertirse en un elemento destacado del torneo. Con rumores de que podría hacer al menos una aparición durante esta edición, su regreso no solo simboliza la continuidad de una tradición, sino también una declaración de fortaleza y resiliencia tras meses alejados de sus deberes públicos por motivos de salud.
La expectativa es palpable. Los fanáticos están listos para ver a la Princesa de Gales aplaudiendo con entusiasmo, riendo con sus hijos o entregando un brillante trofeo a un campeón merecedor. Su presencia, ya sea en un día o en varios, será sentida con fuerza, porque Wimbledon y Catherine son, sin duda, un amor eterno.